
La Mitsubishi Montero de segunda generación es uno de esos productos que definieron una época. Nacida a principios de los 90 y forjada en el ADN del Dakar, la Montero supo combinar como pocas el espíritu off-road más puro con una calidad constructiva japonesa casi indestructible. En su versión corta de 3 puertas, conocida internamente como “Metal Top”, se convirtió en la opción más buscada por entusiastas: más compacta, más ágil y con una estética mucho más deportiva que la 5 puertas. A la Argentina llegaron muy pocas unidades en esta configuración, y menos aún con el motor turbodiésel intercooler y caja manual.
Esta unidad en particular es una Montero 2.8 Intercooler Turbodiesel Metal Top (3 puertas), año 1998, de origen japonés, en un espectacular color rojo que le queda perfecto a la silueta cuadrada y musculosa del modelo. Es, sin exagerar, una de las Montero cortas más vistosas y cancheras que se pueden encontrar hoy en el país. Compacta, robusta y con una presencia que transmite aventura incluso detenida, representa a la perfección esa era dorada de los 4x4 auténticos. Sale a subasta y cuenta con toda su documentación al día para ser transferida a su próximo propietario.






En cuanto a su historia, este ejemplar proviene nada menos que de una de las colecciones más grandes de vehículos clásicos de Argentina, lo cual explica su nivel de conservación y originalidad. Desde que salió de fábrica, el foco siempre estuvo puesto en mantenerla fiel a como Mitsubishi la concibió, sin modificaciones innecesarias ni “mejoras” fuera de época. Esa procedencia suma muchísimo valor para quienes buscan un 4x4 clásico con historia clara y buen pedigree.









Mecánicamente, la Montero se encuentra en un estado impecable. El último servicio fue realizado en 2025, con cambio de aceites y filtros, y desde entonces funciona exactamente como debe: sin ruidos extraños, sin pérdidas y con todo el sistema de tracción operando correctamente, tanto alta como baja. El conjunto motor–transmisión es uno de los grandes diferenciales de este modelo, famoso por su durabilidad y capacidad de recorrer cientos de miles de kilómetros sin sobresaltos. Además, cuenta con cuatro cubiertas Michelin LTX A/T prácticamente nuevas, listas para cualquier terreno.









En términos de originalidad, esta Montero se destaca especialmente. Conserva un altísimo porcentaje de su pintura original, algo cada vez más difícil de encontrar en vehículos de este tipo y edad. Precisamente por eso, tanto el dueño anterior como el actual decidieron no repintarla, aun cuando el capot y el alerón muestran la pintura algo “quemada” por el sol. También se observan algunos chips de ruta en paragolpes y un pequeño detalle en una de las ópticas traseras. Todo esto forma parte de su historia y será decisión del futuro dueño mantener esa pátina honesta o devolverle el aspecto de 0 km.









Un punto clave: el vehículo no presenta óxido en ningún lugar, algo fundamental en este tipo de 4x4 clásicos. Tampoco se tiene registro de trabajos de chapa o pintura previos, más allá de lo mencionado, y no presenta fallas mecánicas de ningún tipo. Anda fuerte, parejo y transmite esa sensación de solidez absoluta que hizo famosa a la Montero en todo el mundo.



Por último, la documentación está completa y al día, lista para transferir. Esta Mitsubishi Montero 2.8 TD Intercooler 3 puertas es una oportunidad rarísima de acceder a un verdadero ícono del off-road japonés, en una de sus configuraciones más buscadas, con historia clara, estado original y muchísimo carácter. Ideal tanto para usar y disfrutar como para sumar a una colección seria de 4x4 clásicos. Un producto que hoy casi no existe… y que mañana será aún más difícil de encontrar.









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